Estimados lectores, ante todo les agradezco su interés por esta causa, destinada sencilla y únicamente a destapar graves peripecias acometidas por políticos y otras autoridades… ¿debo decir competentes?
Les escribo desde mi actual residencia, propiedad de mi gran amigo y periodista Vaughan Smith, en Norfolk. Para que sepan de mi situación: llevo un brazalete electrónico de rastreo, diariamente tengo que dar mi nombre en una comisaría local y cumplo a rajatabla un estricto horario: tan sólo puedo salir de 10 a 14 y de 22 a 2. Soy acusado de una violación, abusos sexuales y coacción contra dos mujeres en Suecia, además de que estoy siendo investigado por espionaje.
A principios de febrero se decidirá sobre mi extradición a Suecia o Estados Unidos, que para el caso es lo mismo, pues Suecia no dudaría en entregarme a un país donde poder encerrarme y torturarme en Guantánamo, e incluso ser condenado a la pena capital, aun violando así el artículo 3 de la Convención Europea de Derechos Humanos. Y eso, les aseguro, no les importará lo más mínimo.Cuando fundamos WikiLeaks, en 2006, nuestra única pretensión era desenmascarar a los culpables de delitos que se habían ocultado a la sociedad. Queríamos, y seguimos queriendo, transparencia. En un mundo mayoritariamente “civilizado”, donde todos “sabemos” la realidad de nuestro gobierno y de nuestros defensores, los que nos van a ayudar cuando haya problemas, no puede haber secretos. Porque se supone que nadie va a permitir que se haga nada malo, nada en contra nuestra. Pero no es así.
Empezamos nuestra actividad a mediados de 2007 y a día de hoy seguimos filtrando información. Durante cuatro años hemos estado trabajando y mucha gente se ha ofrecido a participar con nosotros. Tenemos afiliados en todos los sectores y diversos periódicos que nos facilitan hacerles llegar la información.
Las cosas comenzaron a complicarse en 2010, cuando yo, la cara visible de WikiLeaks, fui acusado de violación y abusos sexuales en Suecia. No es cierto. Pueden creerme o no, pero jamás he forzado a nadie a hacer nada. No lo puedo comprobar, eso también es verdad.
Pero si siguen investigando un poco más, las piezas sólo encajan de una manera: mostrando un puzle de mentiras otra vez, esa acreditación tan sólo es un señuelo para mantenerme encerrado y no poder seguir filtrando verdades. Pero yo les puedo garantizar que eso tan sólo serviría para incendiar definitivamente la situación. La gente se opondría con más ahínco a las autoridades y los cientos de personas como yo seguirían con las filtraciones.
De todas formas, y como ya he publicado, si me pasa algo, de inmediato 1’38 gigas de información mucho más comprometedora de la ya publicada, verían la luz. Porque si caigo yo, ellos, los verdaderos incumplidores de su propia ley, también.
Y es que hay que tener bien claro en cada momento quién es el verdadero enemigo. Quién es el que hace el mal, cumpla o no la ley, quién es aquél que atenta contra los derechos humanos.
Les ruego que piensen en los diferentes delitos cometidos por gente de “bien”, que aunque en el fondo todos sabemos que cometen delitos de corrupción y atentados contra los derechos humanos, no llegamos a saber la magnitud y nunca se ha podido corroborar, pues toda prueba comprometedora desaparece misteriosamente. Nosotros hemos rescatado esas pruebas para dar a conocer al mundo, a la gente de a pie, la realidad de aquellos que deberían estar impolutos. Y es que el poder saca de muchos lo peor. Compruébenlo ustedes mismos:
¿Confundir cámaras con armas? ¿Permitir matar a personas por llevar, supuestamente, armas consigo? ¿No sería más conveniente arrestarlos e interrogarlos, asegurándose así de que sus intenciones no son buenas? ¿Disfrutar asesinando a personas, insultándolas y haciendo mofa de su suerte, cuando tan sólo crees que son terroristas?
Dos periodistas fueron asesinados, entre otros residentes; dos niños tuvieron que ser trasladados a un hospital por el grave estado en que quedaron y, fíjense hasta dónde llega la “humanidad” de los asesinos, que sabiendo que eran niños inocentes, sabiendo que se habían equivocado y sabiendo que su error se había cobrado la vida de personas limpias de cualquier cargo, no dejaron que los niños fueran atendidos en un hospital a cargo de Estados Unidos, con gran avance tecnológico y profesional, sino que los dejaron en manos de un hospital pobre, sin buenos médicos ni medicinas. Y es que por si no les habían destrozado suficiente la existencia, ahora más.
¿Le parecen a usted motivos suficientes para llamarlo “delito”? ¿Creen que aquellos que hemos sacado a la luz delitos como éste tenemos que ser castigados? ¿Nosotros, que hemos descubierto a asesinos de personas inocentes, somos los malos? ¿Nosotros, que se lo hemos hecho saber al mundo y que tan sólo queremos justicia?
Porque eso es lo que muchos creen. Y quizás usted también lo creyese, y no le culpo. Entiendo que se haya creído la información manipulada que cualquiera pueda haberle dicho. Pero ante todo le agradezco que haya comparado la información y se haya dado cuenta de quién es el verdadero enemigo en todo esto.
Miren, y estoy seguro que estarán de acuerdo; las cosas se han hecho mal, y habiéndose arrepentido o no, cada uno ha de cumplir su penitencia. Porque si no, las cosas seguirán igual, haciéndose mal. Y entenderán que eso es lo último que queremos y lo primero que no.
Hasta aquí mis memorias y pensamientos más íntimos, ahora tan sólo queda esperar a la justicia sin dejar de luchar por ella. Pongo la mano en el fuego a que algún día se cumplirá, y espero que podamos presenciarlo. Pero si no es así, jamás crean que todo esto ha sido en vano, desde el primer momento en que alguien, una sola persona, se diera cuenta de esta tropelía, ya me doy por satisfecho.
Por último, me gustaría finalizar esta lectura con la reflexión de todos vosotros. Una reflexión que quiero que incluya una apelación al espíritu de lucha que debemos consagrar, para que la pereza y la comodidad no sean excusa para salir a la calle y alzarse en contra de la injusticia y el mal, porque sin lucha no se consigue nada y porque jamás debemos abandonar esta lucha, jamás debemos caer por muy dura que sea la guerra. Jamás.
Por la transparencia y libertad de expresión. Por un mundo mejor.
Julian Assange.
http://es.wikipedia.org/wiki/Ataque_a%C3%A9reo_en_Bagdad_del_12_de_julio_de_2007
http://www.theage.com.au/photogallery/national/the-internets-freedomfighter/20100521-w1ls.html?selectedImage=2
http://www.eleconomista.es/empresas-finanzas/noticias/2693952/12/10/Wikileaks-habra-dimisiones-cuando-se-revelen-los-datos-sobre-el-banco-de-EEUU-.html
http://www.redusers.com/noticias/julian-assange-la-historia-del-hacker-que-hoy-tiene-su-ejercito-defensor/
http://www.taringa.net/posts/info/8424695/MegaPost-de-Equot_AnonymusEquot_-y-Equot_Julian-AssangeEquot.html
http://www.freeassange.es/
¡Ala!
ResponderEliminarQue pasada, parece de profesional;aunque un poquito larga... pero te ha quedado genial.
:)!
Muy bien, Laura.
ResponderEliminarCoincido en que es un poquito largo el texto, pero está muy bien documentado.